Zamora Campeón del apertura 2016

Otro torneo más sin título

Una temporada esperanzadora. Prometía muchísimo el aurinegro al inicio de este indefinible período con el que la FVF decidió adaptar los torneos al año-calendario.

Tanto el Adecuación como el Torneo Apertura vislumbraban una buena actuación del cuadro tachirense. Pero una cosa es lo que parece y otra muy distinta es la dificultad en plasmar esas expectativas como realidades.

Del Adecuación no vale la pena hablar.

El Apertura fue otra historia. Ahí andaba Táchira, el Deportivo Táchira, intentando asaltar la punta, a la que incluso accedió en algún momento.

Afrontar los compromisos de Libertadores, Copa Venezuela y Torneo nacional, provocó desgaste. Los largos viajes a México, tanto en la fase de grupos como en los octavos de Libertadores, y los más largos retornos, así como la escasa plantilla, tuvieron como consecuencia la debacle ante el Aragua.

No pretendo justificar, pero en una situación política y económica como la que vive Venezuela, demasiado hacen los clubes para mantenerse y sobrevivir.

En todo caso, debería ser satisfactorio haber trascendido la fase de grupos de Libertadores de una manera clara, sin bemoles.

No hay fondo para mantener tantos frentes abiertos. Táchira terminó a solo 2 puntos del Zamora en la fase regular, pero es evidente que el Aragua venía en curva ascendente, mientras que la plantilla aurinegra se desinflaba inexorablemente.

El Zamora vuelve a ser campeón. Una demostración de regularidad en los años recientes, a pesar del cambio de técnico y las condiciones económicas que envuelven al país.

La falta de continuidad

Me da pena ver que año tras año, torneo tras torneo, se manifiesta la falta de continuidad deportiva. Dos derrotas seguidas, una de ellas en casa, y la eliminación en Copa Venezuela, hacen trastabillar los anhelos de los verdaderos aficionados, así como de aquellos que no siéndolo tanto, pujan porque nuestro Deportivo Táchira recupere la solidez y el respeto nacional.

Se que ha sido un traspiés en lo que hasta ayer parecía una sólida campaña que por fin nos llevaría a ganar un torneo con holgura y sin aspavientos. Sin el miedo del soplo en la nuca de los perseguidores, que al final, si nos pasan y ganan, será porque lo merecen, pero también porque hemos aflojado en etapas como la de ahora. Esa falta de fuelle.
El fuelle, como lo llamamos, lo da una estructura compacta y fuerte. Tener «fondo de armario», tener recambios en la banca que suplan las posibles debilidades o pérdidas de balance individual que normalmente ocurren en torneos de envergadura, torneos exigentes, largos o de ambas características.

Pero el fondo no solo lo proporciona tener calidad en la titular y en la suplencia, sino también la entereza, la personalidad, la fortaleza psicológica y física para afrontar viajes, canchas defectuosas, potreros, presión mediática o aficiones hostiles.
Tropezar no significa caer, pero si se cae hay que tener fuerza y ánimo para levantarse y seguir. Esa es la diferencia entre los grandes equipos y los clubes término medio. Estos últimos ante la primera adversidad entran en una espiral de errores, fallas y derrotas que los lanzan a lo profundo de la tabla, a zonas donde no es posible aspirar a más que terminar el campeonato para ir a preparar el otro, y con suerte evitar el peligro del descenso.

Hoy nueva jornada del Apertura

Me gustaría ver algún día a mi Táchira del alma jugando un Mundial de Clubes, contra el Barça, o el Milán, el América de México, etc. Que su categoría creciera y no sólo llegara a estar entre los mejores 100 del mundo, como pasaba hace 10 o 15 años, sino que avanzara y llegara al tope de los 10 mejores, ganando una Libertadores, o al menos llegando a una final.

Lo han hecho equipos como el Barcelona de Guayaquil, o el Once Caldas. Recuerdo que este último por ejemplo, jugó una primera fase poco brillante contra el Unión Atlético Maracaibo, al que le ganó por 2 errores tontos, triunfo que no mereció. Incluso el Maracaibo en esa Libertadores jugó grandes partidos contra Velez Sarsfield. Sin embargo, el Once Caldas, equipo de mitad de tabla en Colombia, llegó a la final y la ganó.
Táchira puede hacer lo mismo, si se invierte y se administra de manera coherente y positiva. Es un sueño, pero qué gran sueño. Sabemos que ahora está en las profundidades de la tabla del Apertura, pero qué aficionado aurinegro no ha soñado con esta posibilidad.
Les invito a visitar las páginas del sitio, donde encontrarán información sobre la clasificación del torneo, la jornada, la Liga Española y la equipación de nuestro Táchira.
También puedes dejar comentarios que con gusto responderé, en el interés de conversar sobre nuestro equipo, como si de una tertulia se tratara.

La Jornada 8 del Apertura 2011

Se cumplió a octava jornada y, según la crónica, se nos escapó el triunfo a última hora, tal como pueden ver en la columna de al lado. Empate a 1 con el Zulia FC, gol marcado por Anderson Arias, el número 1753 en la historia del Aurinegro.
Nuestro glorioso Táchira marcó en el 79′, pero a 3 minutos del final Zulia pudo empatar, amargando lo que parecía ya un triunfo encaminado, dado el dominio demostrado, con un tiro al palo y un penal marrado. Sergio Herrera fue quien falló la pena máxima.
Ahora queda esperar el día 23/10 al Carabobo FC en el polideportivo.
Con este empate el Táchira queda en el 11º puesto de la clasificación general de primera división, con 10 puntos.
Caracas es líder, con 24 puntos seguido del Lara con 21. Los 3 últimos de la tabla son Estudiantes, Llaneros, y Tucanes con 5, 4 y 2 puntos respectivamente.

Tucanes recibió lo suyo

La última jornada del torneo Apertura del futbol venezolano, o la más reciente, jugada el fin de semana del 17 y 18 de septiembre nos dejó el triunfo del Deportivo Táchira. El Carrousel viajo hasta Puerto Ayacucho y le ganó a Tucanes de Amazonas 2 goles a 1. Christian Cáseres estrenó diana con la camiseta de las barras negriamarillas.
Parece que el equipo del Chuy está cogiendo rumbo aunque es pronto para sembrar optimismo en las filas de aficionados. Lara se mantiene sólido en el primer lugar. Sin embargo, espero que este sea el comienzo del ascenso a las primeras posiciones.
Qué maravilla que asisitiera tanta gente al partido en Puerto Ayacucho. La verdad es que más de 15 mil personas en otro estadio que no sea Pueblo Nuevo o Cachamay es de destacar. Se que muchos ahora pondrán el reclamo de que sus estadios también empiezan a tener bastante asistencia, pero no son tradicionales las asistencias por encima de 10 mil, y algunos ni siquiera sobre mil espectadores.
Esto permite inferir y refuerza la impresión de que en Venezuela se juega más fútbol que beisbol y que en un ambiente no «contaminado» por la publicidad beisbolística, la afición predominante es hacia el fútbol.

Aquí está la clasificación del torneo Apertura Primera División | lavinotinto.com