Una de las formas más simples de iniciar la publicación de contenidos en la web es el blog. El mundo virtual, y el real, han sido revolucionados por el desarrollo de la web 2.0. Los gurús y los que no lo son pero tienen bastante conocimiento de esto acuñaron el término «web2.0» y han asumido que el resto de los mortales, virtuales y reales, entienden de qué se trata esto.
Siguiendo la corriente mundial de los últimos 10 años, de la cual forma parte fenómenos como «Gran Hermano», los SMS, la telefonía móvil, el correo electrónico y la participación de los receptores de mensajes de los medios en estos últimos, convirtiéndose en parte activa de la información, surgió en algún momento el acceso a la web no sólo como sujetos pasivos que dejaban la producción y publicación de contenidos en internet a expertos, que mediante estrategias y conocimientos «ocultos» tenían el monopolio, sino como agentes que intervienen y tienen el poder de modificar indirectamente el contenido, y desde hace unos años, de producir estos contenidos.
Ahora es relativamente fácil tener una página web propia cuya expresión más popular es el blog. Mediante una interfaz simple y amigable es posible publicar textos, imágenes, música, videos, en fin, todo en la web de una manera relativamente simple e incluso en tiempo real.
Así como las redes sociales son el siguiente paso en esta evolución, los blogs pueden perfectamente funcionar como fuentes de información, medios de contacto, ventanas de comunicación para las personas.
Una de las cosas más importantes, además de la simpleza de acceso y uso, es la gratuidad del mismo. Es la verdadera democratización del ciberespacio. Es el acceso de cualquier persona, desde cualquier lugar, a exponer sus ideas, sus pasiones, sus intereses, sin pasar por el peaje de los medios de comunicación tradicionales. Otra cosa es que esa información sea vista.
Para que el blog sea visible es casi necesario asociarlo a directorios de blogs, de tal modo que la mayoría acceden a estos directorios y escogen los contenidos a acceder. Existen múltiples directorios que de manera gratuita dan acceso a registrar uno o varios blogs de un autor y los exponen a la vista de los potenciales lectores o usuarios. Si el contenido es de calidad incluso el blog puede aparecer en los primeros lugares de los buscadores, lo que generará más tráfico o acceso de público al blog, lo que puede ser tema de un próximo artículo.